La Virtud del Silencio
La virtud del silencio El silencio, la soledad y la meditación , al estar íntimamente interrelacionados son los soportes básicos y esenciales de la vida espiritual, que los padres tienen que explicar detalladamente a sus hijos. Sin estos soportes es muy difícil, por no decir imposible, prosperar familiar, religiosa y socialmente. La vida moderna rechaza también estas tres virtudes y valores humanos. Estamos llenos de ruido, de gente por todas partes y en todo momento, no dejando ni un minuto para la paz interior, la que únicamente se puede conseguir apoyándose en estos tres soportes. El silencio interno es la puerta a la vida interior y se necesita abrirla diariamente, aunque sólo sea durante un pequeño periodo de tiempo. Es la actitud que tienen las personas que quieren buscarlo, para encontrarse a si mismos y disfrutar de la soledad, interna o externa y así poder meditar. El silencio externo es la falta de ruidos, el no hablar, la omisión de alguna acción no imprescindible,